Gracias a esta tecnología, los vehículos híbridos Toyota
tienen el potencial para consumir hasta un 50% menos combustible que sus pares
convencionales. Por su uso promedio, esta eficiencia implica una reducción de
más del 30% de las emisiones de CO2.
Siguiendo estos principios, las ventas combinadas de Corolla
Hybrid y Corolla Cross Hybrid durante los últimos seis meses suponen un ahorro
de emisiones anuales estimado en 2.042 toneladas de CO2. Esto es el equivalente
a la absorción de CO2 de 102.099 árboles maduros: 20 hectáreas de bosque.
Además de su contribución a la mitigación del calentamiento
global gracias a la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero,
los híbridos tienen grandes ventajas para las personas: no requieren
infraestructura de carga eléctrica y alcanzan una mayor autonomía. Sus
conductores no necesitan hacer ningún cambio de hábito en su vida cotidiana.
El line-up de tecnologías para la movilidad sustentable de
Toyota a nivel global se completa con los Vehículos Eléctricos Híbridos Plug-In
o “enchufables” (PHEV), Eléctricos a Batería (BEV) y Eléctricos de Celdas de
Combustible (FCEV), como el Toyota Mirai, que utiliza hidrógeno para impulsarse.
Desde 1997, la compañía lleva más de 20 millones en ventas de este tipo de
vehículos, que ahorraron alrededor de 65.000 millones de litros de
combustibles.
Toyota tiene el desafío de alcanzar la neutralidad de
carbono antes del año 2050 en todo el ciclo de vida de sus productos, desde la
producción hasta su disposición final. Su compromiso es el de brindar a sus
clientes en 173 países soluciones prácticas, accesibles y de calidad para
satisfacer sus necesidades de movilidad con el menor impacto ambiental posible.